Tosta de tomate, aguacate y Bonito del Norte Ortiz


1 tarro de Bonito del Norte Ortiz en aceite de oliva virgen extra
4 rebanadas de pan
2 tomates maduros
1 aguacate
1 ramita de albahaca
1 cucharada de zumo de limón
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharadita de vinagre de Jerez
Sal
Para que el aguacate mantenga su color: una vez cortado, el aguacate se oxida muy fácilmente en contacto con el aire. Si no lo vas a usar inmediatamente es recomendable que lo rocíes con zumo de limón. Si lo trituras para preparar guacamole u otra crema de untar también resulta recomendable dejar el propio hueso del aguacate en el bol.
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Batimos el aceite con el zumo de limón, el vinagre de Jerez y una pizca de sal para obtener una vinagreta emulsionada.
2Pelamos el aguacate, retiramos el hueso central, lo cortamos en daditos y lo aliñamos con la vinagreta (reservamos una cucharadita para aliñar los tomates). Cortamos los tomates en lonchas
3Repartimos los daditos de aguacate encima de las tostadas y disponemos encima de cada una de ellas dos lonchas de tomate. Aliñamos con unas gotas de la vinagreta y colocamos encima las lascas de Bonito del Norte Ortiz. Espolvoreamos con unas hojitas de albahaca y servimos enseguida.


El secreto de su éxito
Desde siempre, el Bonito del Norte se ha considerado un producto exquisito. Detrás del éxito del «Rey de los atunes» están su textura suave, delicada y poco fibrosa, y su sabor único, que convierte cada bocado en un placer. Obviamente sobre gustos no hay nada escrito, pero si hay un pescado deseado por encima de los demás, es el Bonito del Norte. Un capricho que, afortunadamente, podemos disfrutar a diario.